La Dracaena marginata es una planta de interior elegante y resistente, conocida por sus hojas largas, delgadas y arqueadas que crecen en rosetas desde un tronco delgado y leñoso. Las hojas son de un verde oscuro con bordes finamente delineados en rojo o púrpura, lo que le da un aspecto distintivo y exótico. A medida que crece, la planta puede desarrollar un tronco alto y ramificado, dándole una apariencia similar a la de un pequeño árbol o palmera.

Es una planta popular por su bajo mantenimiento, adaptándose bien a diferentes niveles de luz y condiciones de interior, aunque prefiere luz indirecta brillante. La Dracaena marginata también es apreciada por su capacidad para purificar el aire, eliminando toxinas comunes del ambiente. Su crecimiento lento y su forma vertical la hacen ideal para espacios interiores modernos o minimalistas.